Las nuevas tecnologías siempre han sido de gran ayuda para mejorar la seguridad vial. Los coches de hoy en día van equipados con sistemas que hace unos años parecían de ciencia ficción, pero que hoy nos resultan de lo más normales.

Una de las últimas fronteras de la tecnología es la construcción de realidades alternativas, sistemas que “juegan” con los sentidos del ser humano para hacerle vivir situaciones y experiencias diferentes a la real. Estas experiencias pueden tener un fin lúdico y recreativo, pero son tremendamente enriquecedoras por el nivel de inmersión que ofrecen, y son muchos los campos en los que se están aplicando más allá del entretenimiento. Uno de ellos es la seguridad vial.

Realidad virtual para educar y concienciar

La realidad virtual es una tecnología que lleva mucho tiempo entre nosotros, aunque mucha gente aún no la conoce más allá de los juegos para móvil y desconocen las muchas aplicaciones prácticas que tiene para vida real.

Actualmente, la mayor utilidad que se le está dando a la realidad virtual, aparte del aspecto lúdico, es en el campo de la formación. Esta tecnología permite recrear, a través de unas gafas de RV o de soluciones para móvil, situaciones concretas de forma inmersiva. De esta forma, el usuario puede disfrutar de una experiencia audiovisual de gran calado y enriquecimiento.

En el campo de la seguridad vial, la realidad virtual está cada vez más presente en centros educativos y sobre todo en autoescuelas. De esta forma, los alumnos pueden recibir una formación más amplia, pues además de poder experimentar situaciones de conducción típicas como las que podemos tener a bordo de un coche de prácticas, también pueden experimentar episodios de peligro o emergencia como un accidente de tráfico o una nevada en un puerto de montaña. Y por muy sencillo que sea el sistema de realidad virtual, en cualquier caso será más explicativo que cualquier libro de texto.

La realidad virtual también está jugando un papel cada vez más importante como herramienta de la prevención y la concienciación. Varias instituciones como la DGT han lanzado ya sus campañas para alertar del peligro de las malas prácticas al volante, permitiendo a los usuarios en la experiencia de revivir accidentes de extrema gravedad: conducir bajo los efectos del alcohol, manipular el teléfono móvil al volante, saltarse un semáforo en rojo…

Realidad aumentada para ayudarte en la conducción

La realidad virtual lleva menos tiempo entre nosotros, pero también ha vivido un gran desarrollo con la popularización de los dispositivos electrónicos como los smartphones o las tablets. La tecnología consiste en representar en nuestra pantalla objetos virtuales en 3D en el espacio de la imagen real del entorno que estamos visualizando a través de la cámara del dispositivo.

Cómo vemos, para disfrutar de la realidad virtual necesitamos de la combinación de una pantalla, una cámara y sensores que captan el movimiento del dispositivo. El uso más evidente de la tecnología se da en, como comentábamos más arriba, dispositivos móviles, aunque también puede darse en gafas similares a las de Realidad Virtual.

Sin embargo, un uso menos evidente pero que tendrá más recorrido en el futuro, es a bordo de un vehículo (y ya hemos visto algo parecido). Los coches hiperconectados (en el futuro, los autónomos) pueden disponer de cámaras que capten el entorno, sensores que registren el movimiento del vehículo, e incluso una enorme pantalla que puede servir para representar los objetos virtuales: la luna del coche.

En el futuro, a través de la realidad virtual, se podrán representar en la luna de nuestro coche multitud de información práctica sobre nuestro entorno o los lugares por los que estamos pasando: monumentos, restaurantes, gasolineras… Pero también avisos sobre el tráfico, alarmas de peligros en la carreteras o incluso indicaciones sobre cómo y cuando tomar una curva o una intersección. Las posibilidades son infinitas.

Realidad mixta para interactuar con situaciones virtuales

La realidad mixta o hibrida es una tecnología aún por conocer y eclosionar. Tal es así que se dice que 2018 será su año, cuando se dé a conocer al público y se saquen al mercado los primeros dispositivos. Sin embargo, esta tecnología ya se está utilizando en campos como la formación médica o militar, y aún hemos podido atisbarlo en viejos juegos como el Second Life o en rudimentarias aplicaciones como el Eye Toy.

La realidad mixta, como te podías imaginar, consiste en combinar características de la realidad virtual y la realidad aumentada. Pero el concepto, aún por concretarse, ofrece múltiples formas de expresión: interactuar con objetos virtuales en un entorno real, o en un entorno virtual con objetos (y personas) reales.

La realidad mixta ya está siendo utilizada en centros educativos en asignaturas como ciencias o tecnología, por lo que no es raro que pronto podamos verlo en autoescuelas: imagina poder arreglar un motor virtual, o socorrer a un herido virtual en un accidente simulado.

Las posibilidades en formación vial y el alto grado de aprovechamiento de estas técnicas auguran a la realidad mixta un futuro increíble como herramienta para fomentar la seguridad vial.