La educación vial es un tema muy recurrente en Circula Seguro. No son pocas las iniciativas de colectivos e instituciones nacionales e internacionales de las que nos hacemos eco. Sin embargo, este interés responde a una realidad: la falta de un criterio común y un marco que integre la educación vial en los planes de estudios. Como respuesta, Fundación MAPFRE y otras entidades han elaborado este documento.

Esfuerzos de los gobiernos por la educación vial

El documento Key Principles for traffic safety and mobility education es un informe elaborado en el marco del proyecto LEARN! (Leveraging Education to Advance Road Safety Now!). Los autores que acompañan a Fundación MAPFRE son el European Transport Safety Council (ETSC) y la Fundación Flamenca para el Conocimiento Vial (VSV). Estas entidades han sido apoyadas además por un panel de expertos procedentes de nueve países distintos.

Estas entidades y expertos reconocen el compromiso de los gobiernos de los distintos países por desarrollar programas de educación vial. Así se ha visto refrendado en numerosas ocasiones en las últimas décadas, desde la Convención de Viena de 1986 hasta la Declaración de la Valeta de 2017. Sin embargo, los miembros del proyecto LEARN! advierten de que estos programas de educación vial se han desarrollados e implementados de forma muy distinta en los diferentes países, especialmente en Europa, lo que ha impedido establecer un estándar o marco común.

Por ello, los autores del informe han querido desarrollar una serie de recomendaciones que bien pueden aplicarse sin importar las peculiaridades de cada país, y que pueden servir de base para establecer una estrategia común para todo el continente. Estas recomendaciones vienen acompañadas de casos de éxito de acciones ya realizadas en distintos países, como las realizadas por Fundación MAPFRE en todo el mundo.

Principios clave para la educación vial

Las recomendaciones de los expertos del proyecto LEARN! constituyen en sí mismas una serie de principios clave para la correcta implementación de la educación vial en los centros docentes. Estos principios han sido agrupados en cinco grupos, que marcan las líneas maestras para garantizar el éxito de las políticas educativas en seguridad vial.

Garantizar el derecho a la educación vial y de movilidad

1. Educación continua y progresiva desde niños hasta los 18 años.
2. Incluir un mínimo de horas de educación vial en el plan de estudios de las escuelas.
3. Establecer objetivos específicos para cada nivel educativo, para poder evaluar las estrategias de gobiernos y colegios.
4. Destinar suficientes recursos financieros y materiales tanto a nivel nacional como regional y local.

Involucrar y apoyar a las escuelas

5. Involucrar y apoyar a los directores de centros educativos en la implementación de la educación vial.
6. Motivar a las escuelas a implementar políticas de movilidad y seguridad vial.
7. Designar en cada escuela un profesor como coordinador de las medidas de educación vial y como contacto para padres e instituciones.
8. Fortalecer las competencias de los profesores y apoyarles para que se sientan con confianza para su labor docente.

Garantizar una educación vial de calidad

9. Asegurar la adquisición de conocimientos y habilidades y el cambio de actitud y motivación en los alumnos.
10. Ofrecer una educación vial actualizada, tanto en contenidos como en metodología.
11. Aplicar a la educación vial los mismos requisitos de calidad que el resto de asignaturas impartidas en la escuela.
12. Llevar a cabo evaluaciones de cada actividad que permitan la mejora continua de la misma y otras actividades.
13. Evaluar a los alumnos y permitir que ellos también puedan autoevaluarse.

Facilitar el marco de condiciones

14. Usar material interdisciplinar que permita incluir la educación vial en otras asignaturas.
15. Formar en educación vial a los estudiantes de magisterio durante la realización de sus prácticas.
16. Seguimiento de los procesos por parte de las autoridades locales y nacionales, para garantizar que  las medidas de educación vial se están implantando correctamente en los centros educativos.

Involucrar al conjunto de la sociedad

17. Involucrar a alumnos, padres, colectivos y autoridades en la educación vial, entendiéndose como una responsabilidad compartida por toda la sociedad.

Fundación MAPFRE como ejemplo de educación vial

Como hemos dicho, Fundación MAPFRE ha sido una de las partes más implicadas en la elaboración de este documento. Pero además, ha servido de ejemplo y modelo en el desarrollo de los principios clave. Su programa Road Safety Education Programme, por el que ha sido recientemente premiada por la Carta Europea de Seguridad Vial, ha dado pie a numerosas acciones que bien pueden ser replicados en otros países. Para ello, Fundación MAPFRE ha publicado en su web una ingente cantidad de material didáctico de libre uso por las instituciones y docentes.

En el documento de LEARN! se hace referencia a algunas de estas acciones desarrolladas. En el marco del fortalecimiento de competencias de los docentes, se citan las guías para el profesorado que la Fundación MAPFRE ha elaborado por diferentes rangos de edad del alumno (desde los 3 hasta los 16 años). También, en relación al uso de metodologías actualizadas, se hace referencia al proyecto de realidad virtual de Fundación MAPFRE con el Ayuntamiento de Madrid. En esta actividad, los usuarios podían experimentar los peligros a los que se exponen los ciclistas cada día.

El documento también hace referencia a la necesidad de destinar recursos  económicos, entre otras cosas para poder monitorizar y evaluar la efectividad y los resultados de las medidas tomadas. Fundación MAPFRE destina el 5% del presupuesto de su programa en auditar las distintas acciones realizadas. Como muestra, estas auditorías revelaron que en colegios donde los alumnos prácticamente no utilizaban el cinturón de seguridad, la cifra de uso consiguió elevarse hasta el 70%.