La obligación o no de usar mascarilla fuera de casa, es una de las cuestiones más debatidas durante esta pandemia. Y más aún con el proceso de desescalada y el paso de la mayoría de provincias españolas a la fase 1. El gobierno de nuestro país venía avalando su uso de forma general en cualquier espacio cerrado, siendo obligatorias en el transporte público. Pero tras la reunión mantenida con las Comunidades Autónomas, se ha extendido la obligación a los espacios públicos abiertos en cualquier circunstancia en la que no se puedan mantener los 2 metros de distancia con otras personas, y como era de esperar, en espacios públicos cerrados. Vamos a aclarar los principales puntos que recoge la normativa.
Antes de pasar al detalle de cada escenario, veamos las normas generales: las mascarillas no serán obligatorias para menores de 6 años, si bien se recomiendan en niños de entre 3 y 6 años. Se recomienda el uso de mascarillas higiénicas y quirúrgicas, siempre que no se tenga alguna contraindicación médica y que no se realice alguna actividad incompatible (como beber o comer).
Recordemos que el uso de estos materiales puede crear una falsa sensación de inseguridad que nos lleve a relajarnos en otras medidas de seguridad más importantes si cabe, como el distanciamiento social o la higiene de las manos.
¿Es obligatoria la mascarilla en la vía pública?
Aunque las investigaciones en torno a la COVID están lejos de haberse terminado, la OMS y la comunidad médica ya ha concluido que el virus no se transmite por el aire en sí mismo. El contagio solo sería posible al inhalar las gotículas emitidas por la tos de un portador, o si en un ambiente cerrado fluyen determinados tipos de aerosoles. Por ello, los escenarios donde su uso es obligatorio al aire libre se circunscriben a situaciones donde no se pueda mantener la distancia de seguridad de dos metros.
Como peatones o viandantes, deberemos ser capaces de identificar estos momentos, aunque lo más razonable será, que siempre que salgamos a una calle con un mínimo de concurrencia lo hagamos con mascarilla, puesto que se darán situaciones como pararnos en un semáforo junto a otros viandantes, en la que se reduzca esa distancia de seguridad.
Uso de mascarilla haciendo deporte
Puede ser que, si frecuentamos lugares o rutas habituales entre los deportivas, sea más fácil cruzarnos o coincidir con otras personas y tener un contacto más estrecho. Aquí han chocado de frente dos posturas: Por un lado, la de muchos aficionados que han corrido a comprar los nuevos modelos de mascarillas deportivas que las marcas han lanzado al mercado. Por el otro, la de deportistas de alto nivel y expertos médicos que afirman que el uso de mascarilla mientras se entrena impide el correcto flujo de aire y produce que nos llegue menos oxígeno.
En todo caso, y tras el acuerdo de Sanidad y las Comunidades Autónomas, el deporte al aire libre también podría verse incluido dentro de esas circunstancias en las que sería obligatorio el uso de mascarilla. Sobre todo teniendo en mente las imágenes que se han podido ver estos días de parques y paseos realmente atestados de aficionados al deporte.
Uso de mascarilla montando en bicicleta
Al igual que en los otros caso, hasta ahora no era obligatoria la mascarilla tanto si se utiliza la bici para desplazarse o para hacer ejercicio (dependiendo de la fase en la que nos encontremos). Sin embargo, con la nueva nueva se hace esta distinción entre deporte y forma de transporte. En el primer caso solo podría estar justificado su uso si se forma una aglomeración con otros ciclistas y no nos queda más remedio que circular junto a ellos. El segundo caso podría compararse con el de los motoristas, que actualmente no están obligados a llevar mascarilla si circulan solos.
Uso de mascarilla montando en moto
Actualmente, y tal como ocurre en el caso de otros vehículos motorizados, no es obligatorio el uso de mascarilla si circulamos nosotros solos en motocicleta o ciclomotor. Aunque la norma sí recoge la necesidad de usar mascarilla (o casco integral) en caso de que viajen juntas dos personas. Si estas dos personas viven en el mismo domicilio, quedarán eximidas de esta medida.
¿Es obligatoria la mascarilla en el coche?
Desde el principio de la pandemia, el automóvil se reveló como una forma de transporte segura y recomendable, protagonizando aquellas imágenes de test drive-in llegadas desde Corea. Pero posibilidades de montarnos en un vehículo hay muchas, por lo que nuevamente es recomendable que analicemos cada caso.
Uso de mascarilla en nuestro coche
Al igual que un vehículo particular es un espacio seguro porque supone un espacio cerrado, también supone un riesgo si vamos acompañados. Por eso si bien no es obligatorio usar mascarilla en nuestro coche si vamos solos, sí lo será si viaja con nosotros otras personas. Con la entrada en la fase 1, aunque ya podrán viajar dos personas por cada fila, también seguirán siendo obligatorias las mascarillas para todos. Nuevamente la excepción será en aquellos casos donde los ocupantes vivan en el mismo domicilio.
Uso de mascarilla en taxi y VTC
En caso de que viajemos en un automóvil ajeno, como un taxi o vehículo con licencia VTC, sí será obligatorio el uso de la mascarilla en todo caso. Aquí la norma para la fase 1 solo contempla diferencias para el número de plazas que podemos ocupar: si los pasajeros conviven juntos, todas excepto la de acompañante; si no conviven, dos por fila de asientos. El taxista o conductor siempre viajará en todo caso sin nadie a su lado.
Uso de mascarilla en furgonetas y camiones
En el caso de que seamos conductores profesionales, siempre será obligatorio el uso de mascarilla si vamos acompañados. Además, si nuestro vehículo solo cuente con la fila de asientos delanteros (como la cabina de un camión), solo podremos estar acompañados por una única persona.
¿Es obligatoria la mascarilla en el transporte público colectivo?
Es España se considera necesario el uso de la mascarilla en todos los espacios cerrados. Eso incluye a las distintas modalidades de transporte público colectivo, como el autobús, el tren, el metro o el tranvía. La falta de una ventilación adecuada, sumado a las posibilidad de encontrarnos en aglomeraciones, ha hecho que el gobierno estime obligatorio el uso de la mascarilla incluso en las fases 1 y posteriores.
La excepción de personas del mismo domicilio viajando juntas, solo se tiene en cuenta en la fase 1 en la ocupación de asientos. Si dos personas conviven en el mismo domicilio podrán sentarse juntas. En caso contrario, se deberá mantener un asiento vacío entre cada pasajero. En los autobuses, además, el conductor siempre deberá tener su fila de atrás completamente libre.